Esta semana el Colegio Monte Olivo participó de «La Hora del Código», una campaña de educación digital que recorre el mundo incentivando a que los niños completen una hora jugando y aprendiendo sobre tecnología. Hablamos con Carlos Villanueva, Profesor de Lenguaje Digital y Marcos Pinto, ex alumno y asesor en temas digitales.
¿Cual es su rol dentro de «La hora del Código» en nuestro colegio?
Marcos: En primer lugar, desde Edusmart presentamos esta iniciativa con cobertura y éxito a nivel mundial, que se realiza desde hace algunos años en Chile, y en la cual el Colegio no había participado. Además, colaboramos en la difusión de la actividad y en la selección de las actividades más apropiadas dentro de las disponibles en la plataforma code.org. Este apoyo se presenta como un complemento a la asignatura de «Lenguajes Digitales» que este año implementó el colegio, para la cual estamos asesorando en el diseño curricular y la formación docente.
Carlos: Mi rol como profesor es ser un motivador y un un facilitador, porque hoy en día la programación es una de las herramientas más necesarias para trabajar habilidades en el siglo XXI. La mayoría de los trabajos que tendrán nuestro estudiantes requerirán de algún tipo de programación incorporada. Sin embargo, en pocos colegios se genera ese espacio. Mi labor es acercarlos a este mundo que puede ser complejo, para que lo aprendan de una manera entretenida e interesante.
¿Qué esperan lograr con los estudiantes en la hora del código?
Marcos: Por mi parte ofrecer una experiencia acotada, pero significativa, en temáticas que se están volviendo cada día más relevantes, abriendo un espacio para la formación en habilidades del siglo XXI como son el pensamiento computacional y la programación, entregando herramientas, a través de la asignatura de Lenguajes Digitales, que serán útiles en su aprendizaje y también en su futuro profesional. Queremos que los estudiantes no solo jueguen con tecnología, sino que aprendan y desarrollen tecnología.
Carlos: Como colegio buscamos que los estudiantes tengan una primera aproximación a qué es la programación, a través de juegos didácticos y de desafíos, que son los asignados por los organizadores de la hora del código. Todo esto, con el fin de que valoren la programación y su importancia en el mundo actual.